viernes, 9 de agosto de 2013

Aportes de colegas para los proyectos

Publicamos, en forma anónima, los comentarios/sugerencias recibidos por parte de colegas para los proyectos de la diputada María del Carmen Bianchi. Los mismos fueron enviados vía e-mail a la asesora coordinadora.

Quedamos a la espera de la redacción final de los proyectos como también su presentación en el Congreso para ser tratados y se conviertan en LEY.

1-
Detalles de lo que veo en cada uno:
INSTITUTO DE ARTES GRÁFICAS
  • Habría que establecer un lugar físico para el INAG y su consecuente mantenimiento (alquiler, compra, impuestos, etc...), a cargo de quiénes estaría.
  • Habría que establecer los sueldos y/o beneficios a los que tendrá derecho cada uno de los representantes del INAG y que no podrán ser renobables luego de los 4 años, salvo que no hubiere otro candidato propuesto. Ninguno de los puestos debe quedar vacante.¿ Quienes pagarían estos sueldos?
  • Se deberán establecer la cantidad y tipo de reuniones de toma de desición, para que cada uno de los representantes de los organismos esté presente. Los llamados se harán con el suficiente tiempo y en los canales de comunicación que se establezcan.
  • No me queda claro si los que se inscriban al INAG deben hacerlo solo mediante las agrupaciones  o puden inscribirse de forma individual. ¿La inscripción implica el pago de una cuota al INAG?
  • En el Art.8 habla de los integrantes, de las autoridades, yo agregaría otros para que cada asociación que se anote esté representada, hablo de los vocales. Mi sugerencia:
a- Un representante de la SCN
b- Un representante del MEN
c- Un representante por cada agrupación inscripta en el Instituo (ej.:uno por ADA, uno por el Foro de Ilustradores, uno por Banda Dibujada, uno por la Asociación de Diseñadores Gráficos, uno por.....y así con todos)
d- Un representante que acredite trayectoria en el área de investigación.
Todos estos vocales pueden (pero no es condición única) ser trabajadores de las artes gráficas en ejercicio o en algún momento de sus vidas.
  • En el Art.11 sobre los Fondos de Financiamiento. ¿Cómo se controlan y distribuyen esos fondos? Habría que reglamentar específicamente los pasos para el ingreso y la utilización de esos fondos.
  • En el Art.13. sobre las Obligaciones de los Artistas Gráficos. Cuando habla de realizar al menos 1 exposición para el público cada 2 años. Se debería aclarar que esto puede ser en grupo junto a otros inscriptos en el INAG. Y además, el INAG, debería proporcionar un espacio totalmente gratis para tal fin si el artista no lograre conseguir por su cuenta.
En el punto d- sobre la rendición de cuentas por beca o subsidio ¿se refieren a becas o subsidios individuales que haya obtenido el artista? o que haya obtenido por intermedio del INAG. Si fuera algo fuera del INAG me parece que si es bueno que se informe al instituto como una forma de estadística pero no me parece que deba ser en calidad de declaración jurada ya que el INAG no participó ni propició las condiciones para que el artista recibiera el beneficio, sino que fue por propio mérito del artista.


PENSIÓN PARA DIBUJANTES
  • Me parece muy acertado la ampliación para la acreditación de la obra hecha por el artista.  Ya que se presentan en formas muy diversas. Creo que están bien contempladas en el Art.5 y Art.6.
  • En cuanto a los aportes realizados para percibir el beneficio. Muchos de los ilustradores aportamos como Monotributistas por trabajar de forma autónoma y/o como empleados bajo relación de dependencia en trabajos anexos. Por lo que realizamos aportes al Instituo de Jubilaciones y Pensiones de forma tradicional. ¿Esto se suma, se contempla, no califica? ¿Cómo se maneja este tema? ¿El SUSS abarca todo?
  • Es importante y en reconocimiento de los artistas gráficos que casi tienen la edad jubilatoria, poder otorgarles este beneficio. Ya que, como se conoce en este medio, el artista gráfico es un trabajador incansable y la mayoría de las veces en condiciones que no reconocen su trabajo, sobre todo en malas prácticas que se produjeron desde hace décadas como: quedarse con originales del autor, no recibir el pago prometido, no poder acordar las condiciones en un contrato, el mercado inestable que bajó (y baja) los precios del trabajo del artista, etc. Muchos de los grandes (y pequeños silenciosos) artistas que hicieron el trabajo gráfico de todos estos años son merecedores del beneficio por su dediciación y por tratar de mantener el oficio ante todo.
  • En mi opinión el beneficio de la pensión debe alcanzarlos aún sin haber hecho los aportes que se exigen en este proyecto.
·           

2-
Hola, qué buenas noticias. En principio se me ocurre que entre las funciones del INAG podría estar la de financiar y/o subvencionar la edición de libros, revistas y demás proyectos gráficos creados por dibujantes y diseñadores (obviamente, no me refiero a productos que ya tengan espacio preferencial en el mercado). Según entendí, en el art. 4 (funciones) se habla de organizar exposiciones, entregar becas de estudio, realizar investigaciones, comprar y custodiar originales, etc., pero no se contempla explícitamente algún concurso para nuevos proyectos (como sucede con los institutos de cine o teatro).

Asimismo, en el art. 11 (fondo de financiamiento), podría incluirse algún mínimo porcentaje proveniente de la actividad editorial comercial, aunque admito que esta propuesta puede debilitar la sanción de la ley...

3-
Amigos y colegas Dibujantes Trabajando:
                                                                            Apoyo en todo sentido y en cada una de las partes numeradas en la ley que nos atañe a todos los artistas, y el deseo de que se cumplan y se aprueben dichas leyes. Como artista en el ámbito del Humor Gráfico, he sufrido infinidad de veces el desprecio a la labor que uno ejerce. La mayoría de las veces, y en esto coincido puntualmente con mi colega Eduardo Maicas, que somos un relleno cuando de ocupar un espacio se trata, sea revista, diario o periódico. Los únicos con prioridad, son aquellos que han resultado elegios favorablemente en esta profesión. El resto, afronta una tormenta de maltratos de parte de editoriales, salvo algunos pocos ejemplos. La ley AURA es de relativa importancia para todo aquel que está involucrado en el arte. Propongo, no sólo una asistente legal como la licenciada Bianchi, sino un presidente joven y relacionado con los medios y la cultura, como es Miguel Repiso (Rep) y una asamblea, por así decirlo (sin entrar en el campo de la política) que esté formada por colegas de renombre (Sendra, Maicas, Crist, Langer, Altuna o tantos otros). Espero confiado que esta Ley se resuelva, por la justicia de muchos que han practicado este oficio de la cultura y han sido olvidados (Oski, Viuti, Bróccoli y cientos más) y por la justicia y el derecho propios. Amén.
                      
4-
Quería comentar con respecto a la creación del Archivo de la Historieta y de las Artes Gráficas, que como me señaló José María Gutiérrez éste archivo ya existe y está en la Biblioteca Nacional, creado por Horacio González y dirigido por Gutiérrez y Judith Gociol, por lo tanto me parece más interesante capitalizar de alguna manera lo ya existente que crear un nuevo organismo duplicando al anterior.

Con respecto a los fondos de financiamiento del INAG dice:

e) Los provenientes de la venta de bienes y locaciones de obra o de servicios;

A la venta de qué bienes se refiere? Los originales y otras donaciones a dicho archivo NO pueden ser vendidos y eso debe quedar claro.

5-
Apreciados :
  Como ya lo he mencionado  hay que reiterar y destacar la importancia de este proyecto para  llevar el tan postergado reconocimiento vindicatorio y a futuro que se merecen todos los dibujantes , ilustradores Etc. 
Solo me permito puntualizar:

Artículo 3º. Creación. Créase el Instituto Nacional de las Artes Gráficas, en adelante el INAG, en el ámbito de la Secretaría de Cultura de la Presidencia de la Nación, cuyo objetivo es el fomento, preservación, archivo y difusión de las artes gráficas argentinas.
  Siendo el nuestro un Pais Federal, sería conveniente una mención expresa al alcance y participación en todas y cada una de las Provincias,  o sea dentro del articulado  preveer la adhesion o sumatoria al INAG bajo la organizacion de entidades subsidiarias....

6-
Habiendo leído en detalle las propuestas de la Diputada Bianchi, me sucede que:
Me hace un poquito de ruido el Proyecto 1, sobre todo en la parte donde nuclea por ejemplo, como trabajadores gráficos a los diseñadores, no es mi caso, pero no sé que tanta gracia les pueda llegar a causar a los que sí lo son...
Me inquieta esta suerte de "Instituto..." como con tantas condiciones, que la multa, que el carnet, que el controlador del controlador, el asesor, el presidente , el vice....Entiendo de todas maneras que así funcionan los organismos estatales pero dá cierta espina que se convierta en alguna caja nueva cualquier gobierno de turno,no sé, me recuerda en algo a la famosa Ley de los músicos.
Estoy de acuerdo con el Proyecto número 2, pero creo entender que uno depende del otro?

7-
Agradezco la confianza en mi opinión; creo que acá hay algo más importante aún: para ustedes, igual que para mí, lo más importante es la profesión, pasando individualmente a segundo lugar, nosotros como profesionales.
No creo que yo pueda agregar nada que ya no hayan considerado ustedes, pero puesto a opinar, remarco algunas consideraciones respecto a los noveles que como tales, deben atravesar la etapa más difícil, como lo es la primera.
Tampoco sé cómo están hoy las cosas porque hace ya bastante que he dejado de desempeñarme como colaborador, y tal vez actualmente se haya encontrado alguna vuelta para que no resulten tan lesivas las disposiciones impuestas oportunamente por el ex ministro Cavallo.
De lo que no tengo ninguna duda es de la conveniencia de la o las publicaciones de INAG, que propongo.
Un abrazo

En los años 90 el ex ministro Cavallo dio muerte a dos clases de representantes tradicionalmente reconocidos del periodismo argentino: los colaboradores y los colaboradores permanentes.
Estos siempre habían formado parte –como dibujantes o redactores- de los diarios y revistas de todos los niveles, siendo una parte fundamental de los mismos, aunque sin relación de dependencia, pero vinculados directamente a los medios contratantes, descontándoseles jubilación (entonces era el 9 %) y dándoles el correspondiente aguinaldo a fin de año. Eso lo hacía hasta un Anuario como el Libro de Oro Patoruzú, y pude comprobarlo personalmente, por haber colaborado en el correspondiente a 1960.
Al ser eliminado el reconocimiento a esta clase de profesionales del periodismo, se obligó a los ex colaboradores a inscribirse como trabajadores autónomos, con un régimen totalmente distinto al de sus otros colegas del mismo medio.
Aún en el caso de colaboradores, vinculados a otro medio de la misma empresa por otras tareas en relación de dependencia: diagramación, o tareas que actualmente no existen, como retoque de fotografías, títulos dibujados, etc., con las modificaciones introducidas por Cavallo, no podían seguir colaborando en los otros medios sin inscribirse como autónomos, lo que además de obligarlos a un doble régimen jubilatorio,  significaba una carga fija mensual que a menudo superaba lo que se podía llegar a recaudar con esas colaboraciones, lo que lógicamente desalentaba seguir haciéndolas, ya que una cosa es que se descuente el 9% de lo que uno produce, y otra pagar una suma fija sin cobrar dinero alguno o cobrando una suma inferior a la que hay que pagar para tener ese derecho.
Este nuevo régimen de contratación impuesto de la noche a la mañana, que convertía al ex colaborador en un prestador de servicios circunscripto a una necesidad puntual y momentánea de la respectiva empresa, significó a los otrora colaboradores la inscripción obligatoria en la Caja de Autónomos –aunque por otras tareas periodísticas estuvieran aportando desde siempre como empleados de 4ª categoría. El problema fundamental es que en tanto el descuento jubilatorio para la cuarta categoría se basa en un porcentaje  sobre el sueldo percibido, los ex colaboradores convertidos en autónomos deben abonar un monto básico fijo que en muchos casos supera con creces el monto que de acuerdo a lo percibido, hubiera tenido que abonar si permaneciera en 4ª categoría.
En la aplicación de este régimen hay que tener en cuenta que hay tres categorías de “ex colaboradores” (vamos a llamarlos así  para no confundirlos con los trabajadores naturalmente autónomos): los veteranos, los intermedios y los noveles.
Estos últimos son los que tienen las mayores dificultades para mantenerse en la profesión. Vamos a ejemplificarlo tomando viejos períodos de muchas revistas en circulación: en las décadas de 1940 y 1950, había dos importantísimas revistas semanales: “Patoruzú” y “Rico Tipo”; ambas tenían un problema para los noveles: no daban cabida a los dibujantes nuevos, pues su staff sólo reunía a los consagrados. Felizmente abundaban las revistas del género, y había muchas otras en las que los noveles lograban publicar. Esto se dio después en una revista mucho más trascendente, como “Tía Vicenta”.
Por supuesto, ningún dibujante novel vivía de lo que publicaba en ella o en las otras revistas que daban cabida a sus dibujos.
Hoy lamentablemente, el dibujante aún no consagrado, cuenta casi exclusivamente con la “vidriera” de páginas web o blogs por Internet, pero no es lo mismo capturar lectores por este medio que hacerlo a través de los medios impresos en papel, que pueden ser leídos en un tren, un colectivo, sentado junto a la mesa de un bar, en una sala de espera, en la plaza… Este es un aspecto en el que Internet –con todas sus posibilidades- no puede competir con los medios gráficos en pàpel.
Hoy, que hay tan pocas posibilidades para recoger las inquietudes creativas de los noveles, sería muy importante que el INAG, entre sus objetivos, cree una o varias publicaciones que cumplan el rol que en un aspecto cumplió la revista “Tía Vicenta” a partir de 1957 u otras revistas aparecidas por esos mismos años, orientándose a rescatar la producción artística de los noveles (cuando hablamos de noveles nos referimos a jóvenes profesionales, no a aficionados) que apunten a lograr un mercado de lectores, base y primer objetivo que no se puede descuidar en la profesión. Es más: la o las publicaciones no deben descansar en una subvención oficial, sino por el contrario, si no para obtener ganancias, deben lograr como mínimo autofinanciarse.
Si se logra uno o varios productos como lo fueron oportunamente “Patoruzú”, “Rico Tipo”, “Tía Vicenta” y otras publicaciones menores, que tenga elementos atractivos y se empiece a leer en los medios de transporte, en los cafés, en las plazas, en las salas de espera, el medio gráfico impreso volverá a ocupar un buen lugar en el gusto popular, a pesar de lo que puede brindar Internet, en tanto estas publicaciones pueden actuar como catapulta de los noveles, que a medida que se afiancen y progresen en su carrera profesional, podrán ir dando paso a nuevos noveles.

8-
En principio y ante todo deseo expresar que a ambos Proyecto de Ley encuentro altamente positivos y celebro saber que están en gestación como reconocimiento al aporte que los plásticos y dibujantes en sus diferentes especialidades realizamos a la cultura del país y, como en mi caso particular, también a la educación.

A continuación detallo algunos puntos que a mi entender y según consulté a especialistas, podrían ser observables o de difícil aceptación:

1- Artículo 5 Inciso d): La dificultad que pudiera generar ante la Comisión de Presupuesto el hecho de que se exigirían solo 15 años de aportes a los interesados, es decir: la mitad de cualquier otro aportante, y sin embargo se le otorgue el triple del haber. Esto podría llevar a una dificultad extra para que se apruebe este proyecto de Ley. De tener que negociarse este punto, considero subir los años de aportes pero mantener la propuesta de los 3 haberes mínimos.

2- Artículo 6 (Casos Especiales): Lo veo muy “difuso” y poco preciso,  y en un futuro podría llevar a malas interpretaciones, favoritismos, inclusiones o exclusiones no equitativas, etc…

3- Artículo 7: La Ley 25994 a la que se hace referencia no está vigente. Venció en abril del 2007:


4- Artículo 11: El Comité Consultivo de Evaluación del que se hace mención en este Artículo, considero,  es inaudito e inviable, poco claro y de difícil o imposible aplicación en la práctica. Que un trámite de otorgamiento de beneficio deba pasar por las manos de tantas personas ajenas al ANSES es impracticable. Esto, con el agravante de que algunas de esas personas ni siquiera pertenecerían al mundo de “las artes”.

Una solución, a mi juicio, podrían ofrecerla los Incisos e) g) y h) del Artículo 7 de la Ley que crearía el INAG , ya que este Instituto, según se desprende de  la lectura de estos incisos, estaría habilitado para asesorar a distintos organismo del estado, en este caso la ANSES, acerca de quiénes dicho Instituto considera merecedores o con derecho al beneficio jubilatorio en lo que respecta a la trayectoria de los interesados, publicaciones efectivamente realizadas, exposiciones y demás.

A este respecto el INAG podría ofrecer una especie de “asesoramiento no vinculante” que necesitaría la ANSES para el efectivo otorgamiento de un beneficio a un solicitante.

El INAG podría formar un banco o archivo de datos de cada uno de sus inscriptos a los fines de avalar o acreditar sus consideraciones al momento de ser consulado por la ANSES para el otorgamiento de un beneficio, pensión o jubilación por invalidez.
De este modo el Instituto ya podría contar, previamente y por anticipado, con los datos de quienes estén próximos a solicitar el mencionado subsidio. Esto sería muy beneficioso y ágil, y más aún para las familias, en los casos de solicitud de pensión o invalidez. Es decir, el INAG sería un “asesor” de la ANSES, a fin de que esta última luego otorgue o no un beneficio, según sea el caso.
Hasta aquí mis consideraciones.

9-
Hola. No estoy de acuerdo y no entiendo por qué la mayoría de los cargos en ambos proyectos (en el del INAG: Directorio, Consejo Asesor, etc. y en el otro proyecto también) los elegiría el Poder Ejecutivo Nacional, cuando creo que tendrían que ser electos por los propios artistas. No le veo la conveniencia para nosotros.

10-
Invitados a analizar el Proyecto de  Ley de creación del Instituto Nacional de Artes Gráficas y hacer sugerencias al respecto, queríamos felicitarles por la iniciativa que consideramos trascendental, pero también hacer una necesaria aclaración respecto del Artículo 7 (Funciones) Inc. “e” que propone “conformar un Archivo y Centro de Documentación con el objeto de resguardar el patrimonio que conforman las diferentes artes gráficas del país e integrar la información con otros archivos y centros de documentación similares, nacionales y extranjeros”.
La creación del archivo al que se insta ya existe en el ámbito de la Biblioteca Nacional y fue creado por Resolución, con fecha febrero de 2012, por su director Horacio González con el nombre de Programa Nacional de Investigación en Historieta y Humor Gráfico Argentinos. Sus objetivos, alcances e intenciones, coinciden con los descriptos en el Artículo 4 como funciones del INAG y pueden consultarse en http://www.bn.gov.ar/programa-nacional-de-investigacion-en-historieta-y-humor-grafico-argentinos
Este archivo y centro de documentación de la BN lleva ya un año de pleno funcionamiento, fue presentado en Viñetas Serias 2012; y ha tenido amplia cobertura periodística. Viene trabajando en la incorporación de mobiliario adecuado para ordenamiento y resguardo de los materiales –libros, publicaciones periódicas y, sobre todo, bocetos y originales– conseguidos a través de importantes donaciones (el listado está descripto también en la página web) así como en su conservación preventiva, restauración, reprografía, inventariado y patrimonialización para el Estado. Se ha creado una biblioteca de referencia específica en las materias, y se han organizado la muestra Trillo de Puño y Tecla (marzo-junio 2013);  este noviembre se presentará una exposición en homenaje a Calé y en diciembre se presentará la reedición del Fausto de Oski, entre otras tareas en curso
Si bien nuestro trabajo está centrado en la historieta y el humor gráfico –que contienen la labor de los dibujantes pero también de guionistas, editores, historiadores y teóricos- dado que hay otros campos afines a humoristas e historietistas también hemos incluido producciones ligadas a la animación, la publicidad y la ilustración.
De modo que nuestra sugerencia es no superponer dos organismos nacionales con sentido similar porque esto debilitaría la tarea de ambos. Quedamos a vuestra disposición para conversar más extendidamente este punto y encontrar una forma de trabajo que potencie iniciativas cómo éstas, de revalorización de la tarea de los creadores y la memoria gráfica del país.

En términos generales, estamos muy entusiasmados porque salga un proyecto de esta índole, ya que sería un empujón muy fuerte para el sector. Ojalá llegue a buen término.

Nuestras dudas:

a) ¿Cómo serían las declaraciones juradas? ¿Existe un modelo específico o es solo una carta pro-forma que el INAG elaborará? En este último caso ¿Se puede saber cómo es?

b) En el artículo 13-d dice “En caso de haber obtenido algún premio, subsidio o beca de carácter monetario, se deberá presentar una rendición de cuentas, debiendo expresar con carácter de declaración jurada el destino de los fondos”. Suponemos que este artículo debe referir a subsidios, premios dados por el INAG; para el resto nos parece que tal vez no corresponde. ¿Por qué tendrían los dibujantes que decir lo que hacen con lo que ganan?

c) ¿Se podría aclarar qué significa "un organismo público, no estatal"?

d) Con respecto a las actividades y compromisos de los artistas (muestras, cambios de la declaración jurada, etc.) ¿es sólo para aquellos artistas que se hubieren anotado en el registro del INAG? 

e) A nuestro parecer, creemos que para que las autoridades y representantes de dibujantes del INAG apliquen las horas de trabajo necesarias para desempeñar fehacientemente sus funciones en la entidad, es necesario que reciban un honorario mensual (sueldo). De esta manera, su labor no será sólo un mero hecho de amor por su profesión, sino que será un trabajo, con todos sus derechos y, por sobre todas las cosas, con sus OBLIGACIONES. Con un sueldo, dispondrán de su tiempo para trabajar por el INAG en un 100 % de sus posibilidades.

f) Por último, nos gustaría recordarle a los colegas que la Biblioteca Nacional cuenta con el "Programa Nacional de Investigación en Historieta y Humor gráficos argentinos", programa inaugurado en el 2012, y que cuenta con la dirección de los periodistas e investigadores especializados Judith Gociol y José María Gutiérrez. http://www.bn.gov.ar/programa-nacional-de-investigacion-en-historieta-y-humor-grafico-argentinos
De aprobarse el proyecto de INAG, es necesario que trabaje codo a codo con la Biblioteca Nacional,y con este programa en particular, para no "pisar" emprendimientos y esfuerzos en común.
También, el INAG debería trabajar en conjunto con el recientemente inaugurado Museo del Humor (barrio de Puerto Madero), dependiente del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, y los dos museos privados del humor gráfico existentes en la ciudad: El Museo de la Caricatura Severo Vaccaro (en el barrio de Constitución, fundado en 1945) y el Museo del Humor Diógenes Taborda (en el barrio de Parque Patricios).

11-
Hola colegas, 
Sugiero que dentro de aquellos a quienes afecta, sacar a los Diseñadores Gráficos.
Primero porque es una disciplina que nace como un medio de comunicación visual, si bien puede ser
que un individuo muestre su impronta en un diseño, no es lo que caracteriza a esta profesión. 
Es más bien es una profesión cuya actividad es la acción de concebir, programar, proyectar y realizar comunicaciones visuales, producidas en general por medios industriales y destinadas a transmitir mensajes específicos a grupos socialesdeterminados, con un propósito claro y específico. Basandose en la psicología de la Gestalt, o sea principios establecidos para una apropiada comunicación.

No es lo mismo el diseño de un folleto, logo, sitio web. etc.
 a una creación de autor como una viñeta, o una historieta o una ilustración. El que gestiona dibujo, la ilustración, o el relato visual, pone de si, pone su arte (artista), no solo es un buen o mal comunicador visual.

El diseñador gráfico, estoy generalizando, basicamente es una herramienta comunicacional, pero con fines meramente comerciales. Me cuesta encontrar un diseño gráfico, que no haya sido concebido fuera de la publicidad (si puede ser señalética o infografias). Por ende no lo veo al diseño gráfico como un bastión cultural que amerite un reconocimiento jubilatorio del estado. 

A parte con el auge de las tecnologías, anualmente egresan tanto de universidades estatales como privadas cientos de nuevos diseñadores. Lo cual hace de esta ley, algo que abarcaría a muchos, por ende es menos viable que se apruebe en la comisión de presupuesto.

12-
El Proyecto Bianchi:

Me suena potente e integrador que sea una Instituto Nacional de Arte Gráfico aunque de base estructural ADA ya tiene todo lo que este proyecto propone.
Hace unos años fui vocal activo en la Comisión Directiva de ADA, cargo del que renuncié más tarde por no considerarme apto para ser parte de una comisión que agrupe a todos los dibujantes de la Argentina como bien expresa el nombre de la Asociación.
Yo no me sentía con las herramientas necesarias de gestión para llevar adelante un cargo como ese si el plan es hacerlo a nivel nacional con todo lo que esto implica. Si para armar muestras y asuntos importantes pero de menor envergadura.

Al leer que los miembros serán designados por el Poder Ejecutivo me surge esta duda. Por un lado me suena que deben estar mucho más entrenados en gestión y por otro dudo que estén empapados de las cuestiones que nos tocan como nosotros.
Pienso que el Presidente, Vice-presidente y algún vocal puede ser algún artista reconocido entre nosotros ( por supuesto si este quiere aceptar el cargo) y creo que hay otros cargos que si puede estar bien que los tome gente del Ministerio de Cultura y Educación como se propone en el proyecto.

Todo lo que tiene que ver con el registro de artistas, la promoción de las artes gráficas, el archivo y centro de documentación me parece fantástico. Necesitamos que queden registros de lo que ya se hizo y como se hizo además del reconocimiento a los que laburaron.
El artículo 13 me parece invasivo al pedir una muestra personal cada 2 años y la declaración del dinero en caso de ganar un premio.

En general esta buena, siento que ADA queda por debajo de este Instituto aunque ya tenga habilitado el aparato jurídico necesario, capaz es por un tema de redacción, no lo sé bien.

Proyecto 2

Me parece correcto.